Suprema Corte de Justicia de la Nación

RETRATOS VIVOS II ( 1959-1825)

La exposición permanente de Retratos Vivos, constituye un reconocimiento a todos los hombres y mujeres que han integrado la Suprema Corte a lo largo de su historia. La elaboración del retrato de cada uno de los ministros fue asignada a un destacado pintor; son más de cuarenta artistas a quienes se les encargó la realización de Retratos Vivos con el propósito de que en cada caso se hiciera un trabajo artístico de calidad, en el que no sólo se plasmaran con precisión los rasgos físicos de cada rostro, sino también las expresiones, actitudes y hasta gestos que les son o les fueron, características y datos históricos de cada uno; a través de los cuales se manifieste su personalidad y su espíritu. El orden de presentación de los Retratos Vivos tiene un criterio cronológico.

Se ha querido que esta muestra pictográfica sea exhibida de manera permanente en el edificio de la actual sede de la Suprema Corte, que constituye un lugar idóneo, un espacio arquitectónico de gran belleza para el resguardo de tan especiales obras y que permite conocer en paz, a quienes, bajo el signo de la contradicción entre sí, han impregnado en sus ideas los conceptos de legalidad y constitucionalidad en México.

Los protagonistas que están representados en esta pinacoteca, son los personajes y testigos de las diversas épocas desde 1825 hasta la actualidad. Unos, actores de episodios memorables de nuestra historia; otros, testigos de sociedades a las que no debemos volver jamás. Son aquellos personajes que han dejado de existir y que dejaron un legado de conocimiento jurídico que aún sigue vigente, así como aquéllos que con sus criterios sentaron las bases del desarrollo de la doctrina nacional, base del derecho judicial actual. También a aquéllos que pusieron las bases de la teoría de las garantías individuales y a los que durante la época cardenista les tocó en suerte resolver el juicio de amparo. Asimismo, los que contribuyeron a trazar el camino de la interpretación del código supremo, y a los que les tocó participar en la etapa de la restauración de la República. Concluyendo con los rostros más recientes de personajes que aún viven.

Esta colección, cumple con una doble misión histórica: por un lado, ser un registro fidedigno del género del retrato en la paleta de los artistas plásticos mexicanos desde el siglo XIX hasta los albores de este siglo XXI, y por otro, la reunión de tan insignes personajes. Así, mediante el encuentro de miradas, los espectadores podremos acercarnos más al conocimiento integral de nosotros mismos.

Distribuida en cuarenta y siete muros del edificio sede de la SCJN en el centro histórico de la Ciudad de México. Quienes visiten la sede del Alto Tribunal, podrán contemplar cada una de estas pinturas, y en el recorrido, adentrarse en el curso histórico de los hombres y mujeres que han moldeado el devenir de la justicia en nuestro país.